El debate pretende esclarecer si la práctica es o no contraria a la Constitución norteamericana.
Su noticia está siendo enviada.
Sistema de envío de mensajes no disponible.
Reintente en unos minutos por favor.
Su mensaje ha sido enviado con éxito
Miles de personas hicieron caso omiso a las bajas temperaturas invernales en Washington y participaron en la protesta anual contra el aborto.
Desde los puntos más recónditos del país llegaron hasta la capital estadounidense para manifestarse contra la práctica legalizada hace 35 años en ese país.
Actualmente, la batalla contra el aborto no está en el Congreso, sino en los juzgados. Esto, por que el debate se centra en si la práctica viola o no la Constitución norteamericana. Incluso, por este motivo la marcha se inicia en el Capitolio y termina en el Tribunal Supremo.
Durante mucho tiempo la discusión apuntaba al Tribunal como el interprete de la Carta Magna. No obstante, el 22 de enero de 1973, en la histórica sentencia del caso "Roe contra Wade"
, la corte dictaminó que la interrupción del embarazo no es incompatible con el derecho a la vida, siempre y cuando el feto aún no sea capaz de sobrevivir fuera de la matriz de la madre, un periodo estimado entre las 24 y 28 semanas de embarazo.
El Supremo también reconoce el derecho de los estados a introducir restricciones al ejercicio de este derecho, por lo que existen importantes diferencias dentro de la geografía norteamericana, que reflejan las sustanciales distorsiones en la cultura política de los estados.
El tema forma parte central de la política estadounidense, especialmente en el partido Republicano, donde la "derecha cristiana" condiciona sus votos a candidatos "pro vida".
Agencias