Salgamos ya de la antibolivariana OEA, Jerónimo Carrera

[Pedro Martínez Pírez <pmpirez@rhc.cu>]

Title: Salgamos ya de la anti-bolivariana OEA

OPTICA MUNDIAL

Salgamos ya de la anti-bolivariana OEA

            Una inexplicable anomalía que presenta la actual política exterior de Venezuela, a mi juicio, está en su evidente subestimación de las posibilidades que para una exitosa defensa de la Revolución Bolivariana nos brinda la Organización de Naciones Unidas (ONU). Por contraste, parecería que hay una sobrevaloración de la importancia que en igual sentido pueda llegar a tener la Organización de Estados Americanos (OEA).

            Para empezar, en cuanto a lo primero que planteo, puede citarse el caso de la sorprendente destitución de un reconocido especialista en materia internacional, como lo es Fermín Toro Jiménez, para reemplazarlo en el cargo de embajador ante la ONU por un ilustrísimo debutante llamado Francisco Arias Cárdenas. Todo ello sin la menor explicación ni para el funcionario destituido ni tampoco para la opinión pública.

            Cobra fuerza, por lo tanto, la versión de que ha sido un gesto de apaciguamiento hacia el Departamento de Estado yanqui, tomando en cuenta la combativa actitud bolivariana que el profesor Toro Jiménez venía desplegando en la ONU. Sin embargo, me inclino más bien por la hipótesis según la cual el propio Presidente Chávez no le otorga mayor significación a ese cargo, y por eso relega allí a su viejo amigo –y antiguo rival político- Arias Cárdenas.

            Sea lo que fuese, pienso que a los venezolanos se nos debe dar una explicación clara al respecto, no importa si por tradición al presidente de la república –copiando en esto a la Constitución yanqui y ésta a su vez a la práctica de las monarquías absolutas de Europa- se le confiere la exclusividad en el manejo de nuestra política exterior. En una “democracia participativa y protagónica” no cabe tal exclusividad, me parece.

            Por otra parte, creo oportuno el cuestionamiento sobre el papel que en la OEA estamos haciendo ahora los venezolanos. Poco a poco el Departamento de Estado –y el Pentágono, que no se olvide- han venido montando allí una trampa –la fulana “carta democrática”- en contra nuestra.

            Precisamente la celebración este 22 de junio de los 180 años de uno de los acontecimientos más importantes de la historia de estos pueblos americanos, como lo fue y sigue siendo el Congreso Anfictiónico que en 1826 reunió en Panamá el Libertador Simón Bolívar, lógicamente debería llevarnos a reflexionar sobre la conveniencia de continuar participando en esa OEA que es la negación misma de la idea esencial del pensamiento bolivariano. El dilema que se nos plantea hoy es exactamente el mismo de entonces: monroísmo o bolivarianismo.

            Con tal ánimo, he participado en un Encuentro Internacional dedicado a la proyección actual de ese Congreso, y el cual tuvo lugar en Caracas los días 14 y 15 de este mes de junio por iniciativa del CELARG (o sea la Fundación Centro de Estudios Latinoamericanos Rómulo Gallegos), y en especial de su Director de Investigaciones, el historiador Manuel E. Carrero. Allí en mi intervención terminé diciendo lo siguiente:

            “La Revolución Bolivariana, en nuestra opinión, debería tomar cuanto antes la iniciativa de hacer en la OEA la siguiente propuesta concreta: que se declare la nulidad de la resolución por la cual la hermana Cuba fue expulsada de esa organización hace más de cuarenta años, y de no ser aceptada nuestra propuesta proceder a anunciar la retirada de Venezuela como un acto de solidaridad con Cuba.

            Si Cuba, que hoy es nuestra aliada más definida, ha sobrevivido y progresado en estas cuatro décadas fuera de la OEA, no vemos razón para que Venezuela no pueda hacer lo mismo. Además, es una obligación moral para nosotros los venezolanos presentar esa moción en la OEA, ya que fue en nombre de Venezuela que el lacayo pitiyanqui Rómulo Betancourt se prestó para apuntalar la maniobra del Departamento de Estado de Estados Unidos que impuso la expulsión de Cuba de la OEA.”

 

                                                                                              Jerónimo Carrera

 

         (Publicado en el Semanario La Razón, Nº 597,

          Caracas, domingo 18 de junio de 2006)