Y el circo continúa, por Andrés Gómez

[Pedro Martínez Pírez <pmpirez@rhc.cu>]

Title: Y el circo continúa

Y el circo continúa…

6 de junio de 2007

Andrés Gómez, director de Areítodigital

 

 

 

Miami.-  Continúan presentándose los inconcebibles espectáculos en el circo que montan, para el mundo ver, las autoridades federales norteamericanas con sus socios los terroristas de la extrema derecha cubano americana.

 

En una de sus pistas, en la ciudad de Los Ángeles, California, se continúa escenificando uno que tiene como figura principal al terrorista cubano americano Robert Ferro. Como se recordará, Ferro fue arrestado en esa ciudad, en abril de 2006, ocupándosele el mayor arsenal de armas y explosivos en la historia de los Estados Unidos. La policía estimó que incluía 1571 armas de fuego, al menos 35 ametralladoras Uzi, AK-47, 130 silenciadores, granadas, lanzagranadas y más de 89,000 balas.

 

Pero nada de esto es nuevo para este terrorista --veterano de las Fuerzas Especiales (Boinas Verdes) de las fuerzas armadas estadounidenses y confeso miembro de la organización terrorista cubano americana Alpha 66--, ya que en julio de 1991 las autoridades le ocuparon un primer arsenal de armas y explosivos, también en el sur de California, –almacenado a menos de una cuadra de una escuela primaria- en el que se incluían 300 armas de fuego, municiones, cinco libras del explosivo C-4 y detonadores.

 

Por ese grave delito el tribunal lo condenó a sólo dos años de cárcel, cuando ese crimen es castigado con un máximo de seis años de encarcelamiento.  Además, en aquella ocasión, el juez le permitió al terrorista que prestara fianza para que se mantuviera en libertad.

 

En esta ocasión, por el crimen de habérsele ocupado el mayor arsenal de armas y explosivos en la historia de Estados Unidos, la fiscalía federal redujo los cargos a ese terrorista convicto, a solamente un cargo por posesión de 17 armas de fuego y una granada y no por posesión de las 1571 armas de fuego, incluyendo ametralladoras, 130 silenciadores, granadas, lanzagranadas y más de 89,000 balas… Según informa la prensa la fiscalía rehusa explicar su insólita decisión.  Sólo aduce razones de carácter  “táctico”.  Yo añadiría que éstas también son de carácter estratégico, del carácter que sustenta la razón de este circo macabro.

 

Supongo que la próxima vez que a este terrorista se le encuentre otro arsenal --aún mayor que el segundo— el Congreso le podría otorgar la Congressional Medal of Honor, la más alta condecoración norteamericana. Como van las cosas en esta farsa no lo dudo.

 

Mientras que los 5, Gerardo Hernández, Ramón Labañino, Antonio Guerrero, Fernando González y René González, habiendo actuado para saber de los planes de los terroristas de la extrema derecha cubano americana y así frustrarlos, siguen presos sujetos a crueles y largas condenas falsamente acusados por las autoridades federales de graves delitos por ellos no cometidos.

 

En otra de las pistas del circo, esta vez en Miami, el caso de otros dos terroristas de la extrema derecha cubano americana, Santiago Álvarez y Osvaldo Mitat –los consortes de Posada Carriles; los que lo entraron ilegalmente a la Florida— tendrán una vista judicial próximamente en la que la fiscalía federal, con toda probabilidad, acceda a reducirles las condenas (cuatro años de cárcel a Álvarez y tres años a Mitat) que un tribunal les impuso en noviembre del 2006 por posesión de un arsenal de armas y explosivos –que le fue encontrado en noviembre de 2005-- en depósito en un local del área metropolitana.

 

¿Y por qué en esta pista de este circo macabro la fiscalía federal accedería a reducirles, las ya de por sí, leves condenas a estos dos terroristas?  Pues, nada más y nada menos,  porque los dos terroristas entregaron a las autoridades, en enero de 2007, un segundo arsenal, mayor que el primero, en el que se encontraban docenas de ametralladoras, rifles, dinamita, explosivos C4, detonadores, granadas, lanzagranadas y otras municiones. 

 

Así es que porque estos dos criminales entregaron semejante arsenal de armas y explosivos, almacenado en un local de nuestra comunidad, las autoridades –en medio de una supuestamente vital campaña mundial antiterrorista- le van a reducir sus condenas por posesión ilegal de un primer arsenal…  

 

Además, no son dos hasta ahora los arsenales de armas y explosivos encontrados en poder de estos dos terroristas.  En agosto de 2005, en un local, en Cayo Guincho, Bahamas, las autoridades de ese país le incautaron a estos dos otro arsenal de armas y explosivos.

 

Y no nos olvidemos que en otra pista de este circo macabro, también en Miami, seguramente conspirando con sus otros consortes terroristas, para llevar a cabo más acciones terroristas, vive impune –en completa libertad gracias a la Casa Blanca- el terrorista mayor Luis Posada Carriles.

 

Mientras que los 5, Gerardo Hernández, Ramón Labañino, Antonio Guerrero, Fernando González y René González, habiendo actuado para saber de los planes de estos terroristas y así frustrarlos, siguen presos sujetos a crueles y largas condenas falsamente acusados por las mismas autoridades federales, protectoras de estos terroristas, por luchar en contra del terrorismo… //