Proyecto Telesur

["Roberto Rodríguez Baños" <rrb@red-ami.com>]

Vamos a ponerlo de la siguiente manera: de existir el programa de trabajo propuesto, al conocerse el viernes 3 de noviembre la declaración de Manuel Espino calificando de loco al presidente Hugo Chávez, Telesur habría dado cumplida y oportuna respuesta al presidente del derechista Partido Acción Nacional, PAN, en el poder en México, en las más calificadas voces de su propio país y circunstancialmente de su propio partido, y, explícitamente en las voces de la inteligencia internacional, se habría ratificado en las voces de la inteligencia del mundo y el consecuente reflejo del neofascismo democristiano, la esencia humanista de la revolución bolivariana y la vigencia plena del proyecto chavista.

 

¿De qué manera?:

 

1.      Simultáneamente a las declaraciones de los partidos políticos mexicanos que son mayoría en su rechazo a los pronunciamientos de Espino, los comentarios de Pablo González Casanova, exrector universitario; Samuel Ruiz, obispo emérito de la arquidiócesis de San Cristóbal Las Casas, Chiapas; El subcomandante Marcos, líder del Ejército Zapatista de Liberación Nacional; Andrés Manuel López Obrador, Presidente Legítimo de la República en el consenso del Frente Amplio Progresista, FAP, nacido a raíz del fraude electoral del 2 de julio pasado.

2.      ¿Quién es Manuel Espino y qué representa?. Media hora de panel televisivo donde Espino es una anécdota y el democristianismo, con las ilustraciones que se estime pertinentes (y hay muchas) el peligroso movimiento neofascista que, subordinado a Washington, dirige la batalla contra el espíritu de Bolívar, San Martín,   José Martí, Morelos en la significación de las luchas encabezadas por Hugo Chávez, Néstor Kirchner, Fidel Castro, López Obrador.

3.      A partir de aquí, el tema puede considerarse cerrado por el momento, si bien la inminencia de la circunstancia electoral en Venezuela haría recomendable darle un óptimo aprovechamiento por cuanto el propio enemigo, es decir los democristianos reunios en la convención de la Organización Demócrata Cristiana de América en cuyo seno Manuel Rosales, de Unidad Nacional, es anfitrión de Espino, el aspirante mexicano a la dirigencia continental de la ODCA cuyo postulado iniciático, debe recordarse, consiste en "f ormular un proyecto político que sustente la integración latinoamericana"

 

Espero que lo anterior ejemplifique con la debida precisión el espíritu y modo operativo del proyecto que se propone para complementar la excelente tarea informativa que a la fecha desarrolla Telesur.

 

Roberto Rodríguez Baños