From Wikileaks
Wikileaks: Venezuelan ambassador Freddy Balzan emails 2005-2008
- To: "potero" <potero@rhc.cu>
- Subject: LEGITIMA DEFENSA, por Jorge Gómez Barata
- From: Pedro Martínez Pírez <pmpirez@rhc.cu>
- Date: Tue, 29 Aug 2006 09:34:44 -0400
- Cc: "ifardale" <ifardale@rhc.cu>
Title: El tráfico de drogas no es un negocio, es un crimen, más exactamente un conjunto de actos delictivos que comienzan por el cult
NARCOTRAFICO: EN LEGÍTIMA DEFENSA
Jorge Gómez Barata El tráfico de drogas no es un negocio, sino un crimen que se
comete contra las personas, la familia, las instituciones y la sociedad en su
conjunto. Las drogas no sólo envician, corrompen, desmoralizan y matan
a las personas que las consumen, sino que ejercen un efecto global al degradar las
fuerzas del orden y la administración de justicia. El narcotráfico consigue sus
resultados más terribles al penetrar el sistema político y mezclarse con el
poder que le provee impunidad. Por su carácter transnacional, el tráfico de drogas desde
los centros productores de Sudamérica y Asia hacía los circuitos consumidores
en Estados Unidos y Europa, opera mediante redes internacionales, conectadas con
los carteles locales y regionales que manejan la producción, el beneficio y
procesamiento, las conexiones para el tráfico y la distribución minorista. Se trata de organizaciones criminales que trasiegan gigantescas
cifras de dinero con las que financian el empleo de sofisticados recursos tecnológicos
para el ocultamiento, el transporte, adquisición de armas, documentación e
identidades falsas y una actividad clandestina tan vasta como diversa. Con
dinero los traficantes adquieren impunidad. Las redes de narcotraficantes sobreviven porque cuentan con
la complicidad de autoridades de los países donde operan, la tolerancia de los
servicios policíacos y de administración de justicia y sobre todo, con el miedo.
En esencia, los carteles del narcotráfico son esencialmente organizaciones
terroristas. El consumo de drogas alucinógenas, en sus orígenes una
actividad marginal, practicada por individuos de baja catadura y pésimos
antecedentes evolucionó hasta alcanzar las elites, acceder a las clases medias,
la juventud ilustrada y los estratos altos, sobre todo de Europa y los Estados
Unidos desde donde, por medio de la cultura de masas se exportan a todo el
mundo patrones de conducta y estilos de vida que estimulan e idealizan la
drogadicción. El consumo de drogas no sólo modifica circunstancialmente el
comportamiento sino que causan daños catastróficos e irreversibles a la salud; atentan
contra la autoestima, deforman la personalidad y tuercen el carácter, inhiben el
apetito, perjudican la memoria y merman el rendimiento laboral y académico. La
droga degrada el organismo y la personalidad. El uso continuado de drogas influye
en indescifrables procesos genéticos originando taras hereditarias, conducentes
a la decadencia, no sólo social y moral, sino intelectual. El drogadicto, además
de un trasgresor y potencialmente un delincuente, es de hecho un enfermo que
puede convertirse en un idiota. No hay excusa para la tolerancia
frente al cultivo y la fabricación, el trafico y el expendió de drogas, una
batalla que por sus dimensiones no
pueden librar sólo las autoridades, gobernantes y jueces interesados en
salvar a la juventud y la sociedad de semejante flagelo. Entre las fuerzas que combaten a los narcotraficantes
y a las bandas de distribuidores minoristas, las más expuestas y vulnerables
son aquellos que desde la prensa, el púlpito, las cátedras y aulas y organizaciones
comunitarias, se enfrentan con palabras y argumentos al poderío, la soberbia y
la crueldad de poderosas organizaciones criminales armadas. Al atacar con bombas y granadas a
periódicos y periodistas, los carteles de la droga no sólo pretende
atemorizarlos, sino intimidar a toda la sociedad que perpleja contempla la
impunidad de las autoridades que miran para otro lado, unas veces por cómplices
y otras por cobardes. No honesto ni moral aceptar que el
riesgo es un precio que han de pagar los periodistas honestos que con sentido
de su compromiso con la sociedad y la comunidad, se enfrentan a malignas fuerzas.
Respaldarlos, apoyarlos, es deber de la sociedad, los políticos honestos, las
autoridades limpias y los gobernantes consecuentes con el mandato que el pueblo
les ha entregado. Los narcotraficantes que en busca de
lucro y dinero, envilecen a la juventud y la asesinan silenciosamente, además
de perseguidos, deben sentirse repudiados, denunciados y aislados del mismo
modo que los periodistas, maestros, sacerdotes, jueces y agentes del orden que
los combaten, deben ser protegidos por el escudo que representa el respaldo del
pueblo. |
This message is part of a particular mailbox provided at WikiLeaks and it should be discussed here. See also .
- LEGITIMA DEFENSA, por Jorge Gómez Barata Pedro Martínez Pírez ( August 29, 2006)
- Cubanos en Estados Unidos, por Andrés Gó Pedro Martínez Pírez ( August 29, 2006)
- SUBLIMINAL Muy confidencial karla Aguiar ( August 29, 2006)
- Read: SUBLIMINAL Muy confidenci Freddy Balzán ( August 29, 2006)
- NOTA REBELION SOBRE ARS carlos loza ( August 29, 2006)