LA CARTILLA IMPERIAL
Por: Freddy Balzán M.
Todos los
venezolanos desde niños aprendemos el significado de la palabra cartilla: “cuaderno
pequeño impreso que contiene las letras del alfabeto para aprender a leer”. También es frecuente escuchar la frase: “Hay
que leerle la cartilla a fulano, para que aprenda…” Acertadamente, el
Presidente Chávez, acaba de utilizar el termino “cartilla imperial”, que siguen
al pie de la letra la SIP, los jefes de estado de algunos paises, varias
agencias internacionales, la llamada gran prensa del continente, canales de
televisión reacionarios, dirigentes políticos y sindicales de derecha,
articulistas desprestigiados y en general los organismos financiados desde
Washington, para tratar de descalificar o desprestigiar cualquier iniciativa o
proyecto revolucionario… que pretenda romper con las cadenas de subordinación
política, económica y cultural, que nos impusieron desde hace varios siglos las
potencias coloniales y ahora el neoliberalismo. Para todos esos sectores no existe la palabra
dignidad, sino por el contrario prefieren vivir arrodillados.En el fondo son
racistas, odian a los negros y los indígenas, lamentan que el idioma nacional
no sea el inglés, añoran las fiestas de Hallowen y como no tienen sensibilidad
humana, repudian la integración latinoamericana, aborrecen los sueños de
Bolívar, o los planes sociales para
erradicar el analfabetismo, luchar contra las injusticias o defender la
independencia y la soberanía nacional….Donde
se encuentren los cartilleros repiten sin descanso..!!! Chávez es malo..malo..peligroso…peligroso..terrorista…terrorista…!!! Sin ningún pudor o vergüenza, se
inclinan ante el llamado de Condolezza Rice, de estructurar un frente
antichavista y utilizan cualquiera de
las mentiras y campañas orquestadas por la CIA, para desprestigiarlo, tratanto inutilmente de
aislarnos de la comunidad mundial y de convertirnos en una nación irrespetuosa
de las leyes internacionales. Al mismo tiempo, fomentan intrigas perversas
tratando de fomentar enfrentamientos con la iglesia católica y de dividirnos de
otros gobiernos amigos. Sin embargo, una vez
más queda demostrado la frase del Quijote, “si los perros ladran es porque
vamos por buen camino”, y todos quienes
cuestionan el apoyo energético de la revolución Bolivariana a los
pueblos de Nuestra América y de construir una nación verdaderamente libre,
democrática e independiente, están condenados al fracaso ya que Venezuela no
regresará al pasado ignominioso de la cuarta república ni guardará silencio complice
frente a los atropellos, humillaciones y violaciones a los derechos humanos del
imperio. (fin)
Caracas, 12 de
mayo de 2006