Una
comisión de la Dirección de Inteligencia Militar (DIM) venezolana allanó
en Caracas la vivienda del defensor del terrorista Luis Posada
Carriles, en la que incautaron explosivos y material relacionado con el
caso de la voladura del avión cubano de
1976.
Para el
momento del allanamiento el jurista, Joaquín Chaffardet, no estaba en su
casa debido a que se encuentra los Estados Unidos atendiendo "casos
privados", dijo el miércoles a la AP su esposa María Teresa
Rosas.
De acuerdo
con declaraciones de AP en Caracas, el fiscal militar y nueve funcionarios
del DIM participaron en el allanamiento de la casa de Chaffardet, que se
extendió por cinco horas durante las cuales revisaron todas las áreas de
su casa en presencia de siete testigos, entre los que se incluían cuatro
llevó el DIM, y tres vecinos.
Según
reportes de la prensa, las autoridades venezolanas encontraron explosivo
C4, un cable para detonante y un documento de un general de la fuerza
aérea venezolana que pedía apoyo a Chaffardet para denunciar por varios
delitos al presidente Hugo Chávez, y al ex vicepresidente, José Vicente
Rangel.
María
Teresa Rosas dijo a la AP que los militares también incautaron manuales
que su esposo tenía hace más de 30 años, de la época cuando trabajó junto
con Posada Carriles en la policía política venezolana; "papeles muy
viejos" de la voladura del avión cubano; y "vídeos de seguimiento de
prensa" del caso del terrorista.
Chaffardet,
antiguo funcionario de la Dirección de los Servicios de Inteligencia
venezolanos (DISIP) y ex jefe de Posada en ese organismo en la década
del 70, participó como testigo "experto" en la audiencia del caso
migratorio de Posada Carriles.
Posada, ex
informante de la CIA, ingresó de manera ilegal a los Estados Unidos
en el año 2005 y enfrentó el 30 de agosto de ese año un trámite
migratorio ante una corte de El Paso (Texas), donde se tuvo en cuenta
como evidencia fundamental de que no debía ser deportado a
Venezuela el testimonio de Joaquín
Chaffardet.
"Luis
Posada Carriles no debe ser extraditado a Venezuela para enfrentar cargos
de terrorismo porque sería torturado y humillado en ese país", declaró
Chaffardet entonces, como "testigo" de la defensa. La fiscal Gina
Garrett-Jackson hizo preguntas débiles y no rebatió esta "prueba". Tampoco
cuestionó los estrechos vínculos entre estos dos
hombres.
Chaffardet
y Posada eran socios, además, en la empresa de investigaciones
privada ICICA, donde se planeó el atentado contra el avión cubano
donde murieron 73 personas. |