San José.-El presidente de Costa Rica, Oscar Arias, aseguró que
no se ha "metido con el Gobierno venezolano ni ha ofendido a nadie", pero
advirtió que no callará "por chantajes o temores", informó DPA.
"Si yo tengo que callarme por chantajes o temores, la verdad es que no
valdría estar en la vida pública", dijo el Premio Nobel de la Paz.
Arias dijo a un canal de televisión local que no desea polemizar con el
presidente venezolano Hugo Chávez, quien el miércoles insinuó, sin decirlo
directamente, que el mandatario costarricense es un servil de Estados
Unidos.
El presidente Chávez reaccionó así ante fuertes críticas lanzadas por
Arias hacia Chávez, a partir de los poderes especiales que le concedió el
Congreso.
El miércoles, Chávez dijo que Arias "ofendió al pueblo venezolano", a
la vez que negó que el eventual cierre de operaciones de la empresa
estatal venezolana Alunasa, en Costa Rica, obedezca a una represalia suya.
"No, no me he metido con el Gobierno venezolano ni he ofendido a
nadie", dijo Arias. Sobre Alunasa comentó que "yo creo que el presidente
Chávez ha dicho (que el eventual cierre) es por razones económicas. Eso
tendríamos que verlo, conversando los dos gobiernos".
Sobre las insinuaciones de servilismo hacia Estados Unidos, Arias
comentó: "No quiero polemizar sobre eso, la gente que me conoce en Costa
Rica sabe que hace 20 años (cuando se negoció el plan de paz para
Centroamérica) tuve que discrepar muy fuerte con Washington".
"Fue una discrepancia que tuve que pagar un precio por ello y si yo
tengo que callarme por chantajes o temores, la verdad es que no valdría la
pena estar en la vida pública" subrayó.
Por su parte, el diputado José Manuel Echandi, de un partido
minoritario, dijo que junto con otros legisladores, gestionará una reunión
con la Embajada de Estados Unidos en San José, a fin de plantear la
posibilidad de que ese país suministre materia prima a Alunasa, si ésta
fuera adquirida a Venezuela y convertida en una cooperativa.
La empresa emplea a 400 costarricenses y está ubicada en la región de
Esparza, una de las más pobres del país. Los trabajadores se mantienen en
vilo ante los rumores de cierre y la semana pasada enviaron una carta a
Chávez, pidiéndole reconsiderar una medida de tal
naturaleza.
Ping pong
Arias dijo el 1 de febrero, en alusión a Chávez, que "hay una
diferencia sencilla entre un dictador y un demócrata: si el demócrata no
tiene oposición su deber es crearla, mientras que el sueño del dictador es
eliminar toda oposición".
Chávez respondió el pasado miércoles afirmando que Arias es una persona
a quien le gusta "meterse en cosas que no debe meterse", y que sus
opiniones, además de buscar congraciarse con Washington, ofendieron al
pueblo venezolano. "Al señor presidente de Costa Rica le gusta meterse en
cosas que no debe meterse, hace poco dijo que aquí en Venezuela hay una
dictadura. ¿Cómo quiere él (Arias) que llevemos buenas relaciones?"