El Che vaticinó la caída del llamado
"socialismo real"
Cubadebate/TeleSur/inSurGente.- Un cuarto de siglo
antes de la desaparición de la URSS y la caída del muro de Berlín, Che apreció
el proceso de restauración capitalista impulsado por la superestructura saturada
de ideas mercantiles y expectativas consumistas. Che lo expresa con palabras
estremecedoras por su exactitud y por su asombrosa previsión un cuarto de siglo
antes de que la URSS se derrumbara sin gloria: "Nuestra tesis es que los cambios
producidos a raíz de la Nueva Política Económica (NEP) han calado tan
hondo en la vida de la URSS que han marcado con su signo toda esta etapa. Y sus
resultados son desalentadores: la superestructura capitalista fue influenciando
cada vez más de forma más marcada las relaciones de producción, y los conflictos
provocados por la hibridación que significó la NEP se están resolviendo hoy a
favor de la superestructura; se está regresando al capitalismo" .
Cubadebate/Telesur/inSurGente.-
*PALABRAS
EN LA
PRESENTACIÓN DEL LIBRO "APUNTES CRÍTICOS A LA ECONOMÍA
POLÍTICA", DE ERNESTO CHE
GUEVARA
De su
análisis se derivaba la falsedad del mito manualesco sobre la irreversibilidad
del socialismo una vez establecido, y la suprema lección de que es en la
conciencia y no en el estímulo material de los humanos donde el socialismo puede
hacerse irreversible, si esa conciencia se educa y se alimenta con valores de
solidaridad.
Hacer la
presentación del libro de Ernesto Che Guevara, "Apuntes críticos de
la Economía
Política", requiere ante todo, agradecer al Centro de Estudios
Che Guevara, y a las editoriales Ocean Press y de Ciencias Sociales haber
culminado el arduo trabajo que nos permite tener en nuestras manos este libro
deslumbrante.
Para los que
hemos vivido en Cuba en el ciclo histórico donde el Che actuó, para los que Che
significa el más alto escalón del revolucionario y el comunista, para los que
hemos sido marcados por su ejemplo heroico y su magisterio moral, para los que
leímos Pasajes de la Guerra Revolucionaria, el Socialismo y el Hombre
en Cuba, el Mensaje a la Tricontinental, la carta de despedida a Fidel y el
Diario de Bolivia, parecía imposible que Che pudiera sorprendernos aún más
y hacerse admirar y respetar más aún.
El libro tiene
397 páginas y ni una sola de ellas fue preparada por el Che para ser publicada,
con el cuidado que una publicación supone. Este caudal de páginas son, en su
mayoría, puntes de lecturas, esquemas de obras que se proponía desarrollar,
anotaciones para sí mismo, en las que con su estilo capaz de sintetizar en pocas
y precisas palabras un complejo problema, se interroga, se propone investigar
más un asunto, acopiar datos, y de modo especial, deja escritos juicios críticos
y agudas razones nacidas de su poderosa cultura, de su marxismo realmente
dialéctico y de su incesante trabajo práctico.
El libro es
fascinante por contener el pensamiento del Che, pero también porque
nos
permite asomarnos a su intimidad de trabajo, en su taller intelectual, en
el proceso de construcción de sus ideas, en las impresiones que le causaban
ciertas lecturas, en los planes de obras a escribir que no pudieron serlo,
porque los deberes del revolucionario fueron más apremiantes que los afanes del
teórico marxista.
Che nos sorprende
con su síntesis biográfica de Marx y Engels que iba a ser según el plan
tentativo del libro a escribir sobre economía política, uno de sus primeros
contenidos. En 23 páginas nos ofrece una síntesis biográfica que cumple a
cabalidad el objetivo de trasladar al lector "ese ser tan humano cuya capacidad
de cariño se extendió a los sufrientes del mundo entero, pero llevándoles el
mensaje de la lucha seria, del optimismo inquebrantable. ..", pero que "ha sido
desfigurado por la historia hasta convertirlo en un ídolo de piedra...". "Para
que su ejemplo sea aún más hermoso, es necesario rescatarle su dimensión
humana".
La síntesis
biográfica es una pequeña joya de contenido y estilo, en la que
aparecen
balanceados el intelectual riguroso que fue Marx con el
revolucionario y el ser humano de cálidos sentimientos familiares, de amistad
ejemplar con Engels y de vida austera, enteramente dedicada a sustentar
científicamente la necesidad del comunismo.
Pero es la
discusión crítica de la Economía Política la que ocupa el foco central del
libro.
Discusión crítica de la economía política marxista que gira en torno a
El Capital de Marx, a las obras de Lenin, a la cultura filosófica del Che y a
la Economía
Política que llamándose marxista, encontraba su plasmación en
el Manual de la Academia de Ciencias de la URSS. Este Manual
redactado por orden de Stalin, publicado en 1954 en la primera de varias y
cambiantes versiones y convertido por los años 60 en Biblia económica que en la
práctica, sustituía a "El Capital"; en su parte más lamentable presentaba una
Economía Política de la llamada transición al socialismo, y también del
socialismo desarrollado o maduro y del tránsito al comunismo, que tenía como
característica la apología de la experiencia soviética, presentando como leyes
generales y objetivas lo que no eran más que especificidades de aquel país o
peor aún, simples decisiones administrativas.
Che utiliza las
expresiones herejía y osadía para referirse a su plan tentativo de escribir una
verdadera economía política marxista no apologética y que fuera como "un grito
dado desde el subdesarrollo".
La enorme tarea
intelectual que se proponía era la de repensar el contenido teórico de El
Capital, de las obras de Lenin y de otros autores, en el contexto de los
problemas prácticos del imperialismo tal como éste existía en los años 60 y de
la revolución socialista, teniendo en el comunismo su realización estratégica. Y
hacerlo desde la realidad y con la óptica de los países
subdesarrollados.
Era grande el
tamaño de la osadía, por más que el Che tenía la fuerza política e intelectual
para hacerla.
En los años 60 no
era fácil advertir en la URSS los graves y básicos problemas que el Che apreció.
Menos fácil aún era plantear las críticas sin ser tildado de antisoviético y
anticomunista, pues no era raro encontrar la tendencia a establecer una igualdad
absoluta entre socialismo-comunism o y la URSS.
La función
bíblica que desempeñaba el Manual sin Ciencia de la Academia de Ciencias
se
asentaba, entre otras cosas, en más de cuatro décadas de existencia de la URSS,
en la epopeya de su revolución pionera, en sus victorias sobre la
contrarrevolución interna y la intervención extranjera en los primeros años y
sobre la Alemania fascista en la Segunda Guerra
Mundial, en su capacidad para romper el monopolio nuclear de
Estados Unidos, en la industrialización y el crecimiento económico que escondía
sus graves falencias detrás de logros y avances reales.
Para la joven Revolución
Cubana, agredida y acosada, era lógico ver en la Unión Soviética
–que aparecía como el gran aliado natural frente al imperialismo agresor-, tal
compendio de virtudes, experiencia y fortaleza que hacía muy difícil apreciar
las debilidades.
La crítica del Che al Manual de Economía Política se basa
-como él expresó- en el "mayor rigor científico posible" y en "la máxima
honestidad". Su crítica fue profunda, pero nunca asumiendo la posición de los
oportunistas que atacaban desde la extrema izquierda con el aplauso del
imperialismo.
Che declara que
"nos hemos hecho el firme propósito de no ocultar una sola opinión por motivos
tácticos, pero al mismo tiempo, sacar conclusiones que por su rigor lógico y
altura de miras, ayuden a resolver problemas y no contribuyan sólo a plantear
interrogantes sin solución. Creemos importante la tarea porque la investigación
marxista en el campo de la economía está marchando por peligrosos derroteros. Al
dogmatismo intransigente de la época de Stalin ha sucedido un pragmatismo
inconsistente. Y lo que es trágico, esto no se refiere sólo a un campo
determinado de la ciencia; sucede en todos los aspectos de la vida de los
pueblos socialistas, creando perturbaciones ya enormemente dañinas, pero cuyos
resultados finales son incalculables" .
Para el Che el
momento crucial que marcó el principio del fin de la construcción socialista en
la URSS fue la adopción de la Nueva Política
Económica (NEP) por Lenin. Esto fue un paso atrás en
condiciones muy difíciles de agobio y asfixia económica, una concesión en una
desfavorable correlación de fuerzas, una "paz de Brest" en el terreno de la
economía con todo su amargo significado de repliegue. Che sostiene que por la
lógica del pensamiento de Lenin y ciertos indicios en sus escritos finales; de
haber vivido más el líder de los bolcheviques, hubiera ido variando el esquema
de relaciones que estableció con la NEP- Después de muerto Lenin y a lo largo de un
áspero y trágico período de agrias disputas que condujeron a turbios procesos
judiciales y una sucesión de penas de muerte, el debate teórico fue ahogado y
sustituido por el dogmatismo y la apología.
La NEP, impuesta
por una penosa necesidad, fue convertida en virtud permanente y elevada al rango
de método adecuado para avanzar en la construcción del socialismo e incluso para
alcanzar el comunismo.
Che lo expresa con
palabras estremecedoras por su exactitud y por su asombrosa previsión un cuarto
de siglo antes de que la URSS se derrumbara sin gloria: "Nuestra tesis es que
los cambios producidos a raíz de la Nueva Política
Económica (NEP) han calado tan hondo en la vida de la URSS que
han marcado con su signo toda esta etapa.
Y sus resultados son
desalentadores: la superestructura capitalista fue influenciando cada vez más de
forma más marcada las relaciones de producción, y los conflictos provocados por
la hibridación que significó la NEP se están resolviendo hoy a favor de la
superestructura; se está regresando al capitalismo"
.
Un cuarto de
siglo antes de la desaparición de la URSS y la caída del muro de Berlín, Che
apreció el proceso de restauración capitalista impulsado por la superestructura
saturada de ideas mercantiles y expectativas
consumistas.
De su análisis se
derivaba la falsedad del mito manualesco sobre la irreversibilidad del
socialismo una vez establecido, y la suprema lección de que es en la conciencia
y no en el estímulo material de los humanos donde el socialismo puede hacerse
irreversible, si esa conciencia se educa y se alimenta con valores de
solidaridad.
En las páginas
del libro que comentamos, hay una impresionante cantidad de
filosas
observaciones y críticas sobre el Manual de Economía Política, que
hace imposible referirse siquiera a todas ellas aunque no sea más que
mencionando el tema tratado.
Pero, no resisto a la
tentación de seleccionar algunas pocas.
- Sobre el
aumento de la cohesión de la clase obrera y de su organización y grado
de
conciencia: "Esto está dentro del marxismo ortodoxo en la forma, pero
choca con la realidad actual. La clase obrera de los países imperialistas ha
aumentado en cohesión y organización pero no en conciencia, a menos que se le dé
ese nombre a la conciencia de formar parte de los explotadores mundiales".
- Sobre
categorías económicas entre las que se incluye el "cálculo económico": "Entre
las categorías económicas, junto a las importantes del capitalismo y a
definiciones, como día de trabajo, se introduce el cálculo económico. Hay que
tenerlo presente, para examinar las razones en que se basan para hacer de un
método de administración una categoría económica".
- Sobre la expresión
"capitalismo agonizante: "Hay que tener cuidado con afirmaciones como ésta.
"Agonizante" tiene un significado claro en el idioma; un hombre maduro ya no
puede sufrir más cambios fisiológicos, pero no está agonizante. El sistema
capitalista llega a su madurez total con el imperialismo, pero ni siquiera
éste ha aprovechado al máximo sus posibilidades en el momento actual y tiene una
gran vitalidad. Es más preciso decir "maduro" o expresar que llega al límites de
sus posibilidades de desarrollo".
- Sobre el papel de
la clase obrera como supuesta fuerza dirigente del movimiento de
liberación
nacional: "Se insiste en una afirmación que va palpablemente contra
la realidad.
Es un caso de apologética ciega".
- Sobre "cambios en
la correlación de fuerzas y la posibilidad de conjurar una nueva guerra mundial"
: "Ésta es una de las más peligrosas tesis de la URSS, que puede aprobarse como
una posibilidad extraordinaria, pero no convertirse en el leit motiv de una
política.
Tampoco ahora las
masas son capaces de impedir la guerra y las manifestaciones contra
la de Viet
Nam se deben a que la sangre corre. Es el heroísmo del pueblo
vietnamita en lucha el que impone la solución; la política de apaciguamiento,
por otro lado, ha reforzado la agresividad yanqui".
"Sería bueno
precisar a qué es lo que llaman guerra estas
gentes".
- Sobre la "vía
no capitalista de desarrollo :"Habría que investigar dónde Lenin pronunció o
escribió esa frase "vía no capitalista" ; es ambigua y no creo que lo haya
hecho. De todas maneras, si no es capitalista ¿qué es? ¿Hermafrodita? ¿Híbrida?
Los hechos han demostrado que puede haber un corto período de lucha política
antes de definir la vía, pero ésta será capitalista o
socialista".
- Sobre la "ley
económica de la distribución con arreglo al trabajo" : "Muy vago y muy inexacto
en cuanto a la realidad de hoy. ¿Cuánto trabajo invierte un mariscal y cuánto un
maestro?, ¿cuánto un ministro y cuánto un obrero? Lenin en El Estado y la
Revolución tenían una idea (marxista) que luego desechó de la equiparación de
sueldos de funcionarios y obreros pero no estoy convencido de que su marcha
atrás sea correcta".
- Sobre la
"construcción de la economía socialista en los países europeos de democracia
popular" : "La puntilla.
Esto parece escrito para niños o para estúpidos. Y el ejército
soviético ¿qué? ¿se rascó los huevos?
- Sobre la
"eliminación del peligro de restauración del capitalismo en la URSS" :
"Afirmación que puede ser objeto de discusión. Las últimas resoluciones
económicas de la URSS se asemejan a las que tomó Yugoslavia cuando eligió el
camino que la llevaría a un retorno gradual hacia el capitalismo. El tiempo dirá
si es un accidente pasajero o entraña una definida corriente de
retroceso".
- "Todo parte de
la errónea concepción de querer construir el socialismo con elementos del
capitalismo sin cambiarles realmente la significación.
Así se llega a un sistema híbrido que arriba a un callejón sin
salida o salida difícilmente perceptible que obliga a nuevas concesiones a las
palancas económicas, es decir al retroceso".
- Sobre el
tránsito al comunismo basado en alcanzar un nivel de producción y productividad
más alto que el capitalismo: "El modelo comunista de producción presupone una
abundancia considerable de bienes materiales pero no necesariamente una
comparación estricta con el capitalismo.
Cuando el
comunismo se haya impuesto como sistema mundial, vivirán en él pueblos
de
diferente desarrollo, hasta que se nivelen luego de muchos años. Hacer del
comunismo
una meta cuantitativa y cambiante, pues debe aparearse al
desarrollo capitalista que sigue hacia delante, es mecanicista por un lado y
derrotista por el otro.
Sin contar que nadie
ha reglamentado, ni puede hacerlo, la tal emulación pacífica con
el
capitalismo, aspiración unilateral, noble en su sentido superficial, pero
peligrosa y egoísta en su sentido profundo, pues desarma moralmente a los
pueblos y obliga al socialismo a olvidarse de otros pueblos atrasados por seguir
su emulación".
Notas tan
reveladoras de un pensamiento dialéctico afianzado en un marxismo creador
y
antidogmático, aparecen también en la selección de notas críticas sobre obras
económico-filosó ficas del marxismo que incluye el Manifiesto Comunista, el
Anti-Duhring, El Estado y la revolución y otros numerosos trabajos de Lenin, así
como Sobre la contradicción de Mao Tse Tung.
En la selección
de actas de reuniones efectuadas en el Ministerio de Industrias se encuentra
otro tesoro de análisis sagaces, profundos; esta vez en el tono y a veces el
desenfado del lenguaje oral en medio de reuniones de trabajo donde el Che aborda
con flexibilidad y estilo didáctico, temas que van desde las complejidades
conceptuales de la oposición al cálculo económico hasta el análisis de los datos
estadísticos diarios de la industria y sus problemas de organización y
operación.
Che cumpliría hoy
78 años. Sería retórica gastada decir que no se ha ido, que nos acompaña, pero
en cierta forma profunda y entrañable, no es
retórica.
¿Cómo explicar
que nuestro pequeño y pobre país, acosado por la guerra económica, a
pocas
millas de la "Roma
Americana" haya resistido en soledad tanto la agresión
como
la seducción y que asombre al mundo derramando solidaridad en el
Himalaya, en Indonesia, en Venezuela, en ¡Bolivia! donde Che entregó su vida y
hoy su nuevo presidente le rinde honores en La
Higuera?
Las razones de esa
descomunal resistencia, que contrasta con el triste derrumbe de aquellos que el
Che critica en este libro, son diversas y la primera de ellas es la
clarividencia estratégica, el liderazgo, la tenacidad y la autoridad moral de
Fidel, e inmediatamente aparece el Che, símbolo por excelencia de la moral
comunista, del combate al individualismo, a la banalidad, al lucro como ideal de
vida.
Si estamos aquí
Comandante Guevara, ha sido también porque tu ejemplo caló bien adentro en el
pueblo y eres parte de la coraza con que protegemos nuestro derecho a construir
el socialismo después que otros capitularon.
Tus Apuntes
críticos sobre la economía política son mucho más que una interesante
información sobre una polémica de los años 60, porque si bien hemos resistido a
las ofertas del neoliberalismo, de la "tercera vía", del capitalismo disfrazado
de socialismo, se mantienen vivas tu permanente advertencia contra "las armas
melladas del capitalismo" , tu suprema lección de ética y tu llamado aún no
cumplido, para avanzar en una necesaria economía política del socialismo, que no
existe aún y reclama un profundo trabajo teórico-práctico que los economistas
cubanos no hemos sido capaces de hacer.
Esa economía
política pendiente de escribir tendrá que surgir utilizando como base general a
Marx, Engels, Lenin e incorporando la revisión crítica -en el ambiente de debate
a fondo que el Che practicó-, del pensamiento elaborado sobre el filo de la
contradicción imperialismo- socialismo, esto es, Rosa Luxemburgo,
Trotsky, Preobrazhenski, Bujarin, Gramsci y otros muchos, con
especial atención al pensamiento de Fidel y sin olvidar el renaciente
pensamiento de izquierda latinoamericano.
En esta tarea la
obra teórico-práctica del Che es de obligada presencia, pues en mi opinión,
además de otros títulos de superior jerarquía histórica, Che es también el más
creativo y original de los economistas cubanos. Nos ha entregado hasta el
plan tentativo de la obra que no alcanzó a redactar y que en ausencia de su
talento, será probablemente el resultado de un trabajo colectivo.
La obra que el Che no
pudo redactar es de Economía Política marxista. No se trata de un texto de
economía neoliberal en el que la palabra política ha sido eliminada y que
pretende encerrar el pensamiento de los economistas en una jaula de
trivialidades teóricas vestidas con lujoso aparato matemático. Las técnicas
empresariales y de mercadeo, y los modelos matemáticos son útiles instrumentos
auxiliares cuya aplicación tiene que estar determinada por la Economía Política
que continúe alumbrando el camino que nos ha mantenido en el socialismo durante
47 años.
Para avanzar en la
tarea ya no es necesario enfrentar la Biblia que en forma de Manual pretendía
ser compendio de supuestas verdades universales. Aquel Manual quedó enterrado
junto a los escombros del derrumbe. De ese derrumbe es necesario también extraer
y sintetizar conclusiones, así como repensar la economía política del socialismo
en las condiciones de un país que continúa económicamente bloqueado, que se vió
obligado a hacer concesiones en los inicios del período especial a una cierta
ampliación de las relaciones mercantiles y otorgar facultades a las empresas en
cuanto al uso descentralizado de la divisa, pero que nunca convirtió la
necesidad en virtud ni perdió de vista el peligro que
enfrentaba.
El uso
descentralizado de la divisa comenzó a emitir después de algún tiempo, síntomas
-aunque en escala incipiente- coincidentes con los análisis del Che sobre los
efectos a favor del capitalismo, de la ampliación de las relaciones mercantiles
en la construcción del socialismo. En las decisiones para la rápida
rectificación de esas desviaciones, que incluyen el establecimiento de la Cuenta
Única de Ingresos del Estado, la eliminación del dólar de la circulación y la
lucha frontal contra la corrupción, están presentes las enseñanzas del
Che.
Los Apuntes Críticos
de la Economía
Política escritos por el Che son mucho más que una instructiva
lección de historia acerca del debate de los 60 sobre el socialismo, el cálculo
económico y el sistema presupuestario de financiamiento. Es este libro lo que me
atrevo a decir que el Che quiso que fuera: un arma político-intelectual de alta
eficacia para contribuir a ese permanente combate contra el imperialismo y
contra el egoísmo y la complacencia que cada día debemos expulsar de nosotros.
En esa Batalla incesante de Ideas el Che es imprescindible.