A mis amigos y amigas - nire lagunei

["Ingo Niebel" <ingo.niebel@berriak-news.de>]

A mis amigos y amigas - nire lagunei:

Os puedo informar de que después de largos meses de lucha, llenos de
presiones de todo tipo y de calumnias, he ganado dos de los tres pleitos
contra el Imperio mediático. (Lo que queda es de menor importancia.)
En febrero revelé en un congreso de historiadores que la editorial M.DuMont
Schauberg (MDS) de Colonia, el n°4 del sector en Alemania, se aprovechó de
la política antisemita del nazismo comprando varios terrenos, anteriormente
en propiedad de alemanes judios.Después de la derrota incondicional del
Nazismo la empresa "olvidó" este hecho en las publicaciones sobre su pasado.
Aunque fue de las pocas editoriales privadas que no fueron nacionalizadas
por los nazis nadie se preguntó por qué MDS continuó produciendo y logró
expandir entre 1933 y 1945 a pesar de ciertos problemas con el partido nazi
de Colonia. La militancia de los propietarios de entonces, entre ellos está
el padre del actual dueño, en el partido nazi y la entrega de una alta
distinción  cívico militar fueron omitidos a la opinión pública mientras que
al mismo tiempo MDS se presentó como una "víctima" del nazismo. Además tenía
la desfachatez de editar un serie sobre el nazismo en Colonia para que sirva
de material de estudio en las escuelas. En la falsa imagen de su propia
historia no tenían cabida mis investigaciones sobre la compra de los
terrenos de judios. Debido a la persecución de este grupo religioso los
precios eran bajos ya que muchos judios tenían que vender su propiedad para
poder hacer frente a los impuestos que el Estado alemán les imponían. El
credo del capitalismo es: "El dinero no desaparece, sólo cambia de dueño."
El bien planedado expolio de los judios suponía su "muerte financiera" a la
que le siguió la muerte física en los campos de exterminio.
El nazismo fue vencido en los campos de batalla, sus dirigentes de la
segunda fila sentenciados en Nuremberg, pero a partir de la tercera fila
para abajo destacadas personas volvieron a actuar en la República Federal de
Alemania. Las pocas excepciones confirman la regla. Aunque me duela, desde
el punto de vista de un alemán nacido en 1965 y socializado en la RFA, y
debido a las recientes experiencias, he vuelto a darme cuenta que el nazismo
es como la malaria: uno lo lleva en el cuerpo y de vez en cuando puede
brotar si no se toma a tiempo la medicina adecuada.
Denunciar aquellos hechos "olvidados" no fue sólo para acabar con la
hipocresia de aquella empresa mediática que con su casi monopolio emborrona
la menta de la región de Colonia - para favorecer a los negocios de sus
dueños que son multimillonarios. (Por cierto: Si alguien - sobre todo si es
uno de mis compañeros cubanos - busca a una persona que según Forbes posea
realmente 700 milliones de euros (es la suma atribuida a Fidel) - puede
dirigirse a mí. Le facilitaré todos los datos y además detalles como éste:
parte de su dineral la debe a que el Ayuntamiento de Colonia "privatizó" el
edificio donde se hallan las oficinas de la administración municipal. Desde
haces varias años ya el Ayuntamiento está obligado a pagar un alquiler fijo
que se ubica por encima de lo que da el mercado inmobiliario. Es decir no
sólo en Venezuela existe un Gustavo Cisnero sino también en Colonia pero con
otro nombre.)
En los pleitos que los empresarios de MDS iniciaron contra mí pude ver que
la misma mentalidad que "legalizó" el expolio de un grupo social entre 1933
y 1941/45 volvió a aparecer en los escritos de los abogados enemigos. Este
hecho me dolió aún más porque hace cuatro meses habría pensado realmente que
esta forma de pensar era sólo de la ultraderecha. No es así.
En el 2001 el rabbino Erwin Schild, quien nació y vivió en mi barrio hasta
su fuga en 1938, me dijo: "La culpa, no se la hereda, la responsabilidad
sí."  Esa ha sido consigna bajo la cual presenté en febrero mi ya histórica
ponencia. No puedo negar que la batalla me ha dejado físicamente cansado y
que estoy deseando pasar una larga estancia en mi querida Euskal Herria
(País Vasco) pero al mismo tiempo he salido de esta pugna con la convicción
fortalecida: "el fascismo no es ninguna opinión, es un crímen". Sus
bacterías siguen infectando. Una vacuna en su contra es la verdad histórica
para evitar terapias más drásticas. Heinz Dieterich tiene razón, mucha
razón, cuando alerta ante el nuevo fascismo. Las nuevas generaciones han de
tener en cuenta la Guerra Civil española como ejemplo de resistencia al
fascismo y nazismo pero han de desarrollar su propia estrategia ya que la
Historia no se repite y la Política se desarrolla en otras condiciones. La
izquierda - en primer lugar alemana - ha de aprender a triunfar. Tengo que
reconocer que fueron mis recientes estancias en Cuba y Venezuela donde
encontré la fuerza y también los conocimientos para entablar y ganar esa
batalla. Detalles en otra ocasión.
A todos vosotros y vosotras que me habeís apoyado a lo largo de esta lucha
os agradezco de todo corazón porque solidaridad en alemán - Solidarität -
sigue siendo un extranjerismo en este país (las excepciones alemanas que
afirman esta regla saben castellano y han recibido este mensaje).

Un fuerte abrazo a todos y todas  - besarkada handi bat denoei
Ingo




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Ingo Niebel, M.A.
Historiador y periodista

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D 51005 Köln
República Federal de Alemania

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